Mira en tu jardín
Mira en tu jardín las rosas entreabiertas y nunca los pétalos caídos.
Observa en tu camino la distancia vencida y nunca lo que falte todavía.
Guarda en tu mirar los brillos de alegría y nunca las nieblas de tristeza.
Retén de tu voz carcajadas y canciones y nunca los gemidos dolorosos…